Plantas de gas natural
Una planta de Gas Natural es una instalación de gran valor económico y alto riesgo de incendio por los materiales que se procesan en ella y su facilidad de combustión. La principal zona de riesgo es el área de almacenamiento de gas, que se realiza en tanques fijos aislados a una temperatura por debajo de su punto de ebullición de -164 ºC. Es fundamental evitar riesgos de accidentes para proteger las instalaciones y a los empleados de la planta.
En la planta se encuentran otras zonas de riesgo como salas de control, zonas de almacenamiento, depósitos de combustibles, equipos eléctricos, generadores y bombas, zonas de carga y descarga de camiones, etc. Todas estas áreas deben ser consideradas como zonas de riesgo, puesto que un incendio en cualquiera de estos lugares sin la protección adecuada, podría propagarse a los tanques y aumentar los riesgos. Las plantas de Gas Natural deben cumplir la normativa vigente como la NFPA 59A, “Norma para la producción, almacenamiento y manipulación del Gas Natural Licuado (GNL)” donde se establecen las medidas de protección contra incendios.
Los principales riesgos que pueden presentarse en una planta de Gas Natural donde el gas sea el responsable de un accidente son:
- Fugas en colectores de descarga de buques y bombas.
- Descargas de gas por sobrepresión en el tanque.
- Fugas en las líneas de distribución.
- Fugas en los compresores.
- Accidentes en el pantanal de descarga.
La protección de incendios para evitar accidentes se centra en tres ámbitos: prevención, control y extinción. En cuanto a la extinción, que actúa cuando se produce una fuga de gas con una fuente de ignición cercana que produzca el incendio; se ha de aplicar el agente extintor sobre el incendio y los posibles puntos de fugas de gas como conductos de ventilación y válvulas de descompresión de los tanques de almacenamiento para evitar la propagación el incendio.La planta de gas debe contar con sistemas de extinción automáticos de incendios y de medios manuales para aplacar cualquier accidente producido por fugas de gases y derrames que puedan desembocar en acumulación de vapores inflamables.El sistema automático de extinción de incendios debe proteger las zonas con riesgo de incendio mediante boquillas o difusores colocados adecuadamente para cubrir todas las zonas de riesgo.